Primeros éxitos
A finales de 1999 Jenni retoma su relación con Juan López. En enero del 2000 firmó contrato con la disquera Fonovisa y grabó Que me entierren con la banda, primer disco de su discografía oficial grabado con banda, el cual incluía «Las malandrinas», «Que un rayo te la parta» y «Solo sé de amor», canciones escritas por ella misma. Con dicho material llegó el despliegue de su carrera.
El estilo musical de este disco estuvo marcado por su identidad chicana, combinando lo norteño con lo americano. El primer sencillo fue «Las malandrinas», corrido de su autoría que llegó a ubicarse dentro del Top 20 en las listas de preferencias radiales en California y que rápidamente la dio a conocer entre la comunidad latina a lo largo del Suroeste de Estados Unidos.
En los últimos meses del 2000 graba el disco Déjate amar, que abordaba problemas de su propio identidad femenina en temas como «Madre soltera». En enero de 2001 Fonovisa publicó el material junto al primer corte promocional «Querida socia», tema con que empieza a figurar en el top musical de la revista Billboard, y también el primero con el que recibió críticas positivas, de críticos que la compararon con una actriz de Hollywood o Broadway.
El 11 de febrero de 2001, nace su hijo Johnny Ángel, el más pequeño de sus hijos. El éxito de sus recientes promociones trajo consigo ganancias económicas para la familia, pero a la vez versiones de que los Rivera se habían hecho de dinero porque se dedicaban al tráfico de marihuana y cocaína, versiones que ella negó. Ese mismo mes también se escucharon versiones falsas de que existía una fuerte rivalidad entre ella y todos sus hermanos por la competencia que supuestamente generaban sus carreras, además de que les causaban conflictos de intereses a sus respectivas disqueras, las cuales la familia desmintió unida en todo momento.